Tercera Parte:   La crisis  del Capitalismo del siglo XXI
FUNDAMENTO
El eje de su argumento es la fórmula r > g , donde r representa la tasa media anual de rendimiento del capital (es decir, beneficios, dividendos, intereses y rentas) y g representa la tasa de crecimiento económico. Durante gran parte de la historia moderna, la tasa de rendimiento del capital se ha situado entre el 4 y el 5 por ciento, mientras que la tasa de crecimiento ha sido decididamente inferior, entre el 1 y el 2 por ciento. Este funcionamiento crea una fuerza desestabilizadora, dado que cuando r > g , el capitalismo genera automáticamente desigualdades arbitrarias e insostenibles que socavan radicalmente los valores meritocráticos en que se basan las sociedades democráticas.
En otras palabras, en una economía de lento crecimiento, la riqueza acumulada crece más rápido que los ingresos del trabajo. Por tanto los ricos, que ya tienen la mayoría de la riqueza, se hacen más ricos, mientras que todos los demás, que dependen principalmente de los ingresos de su trabajo, quedan desplazados. Los países en los que r > g constituyen gran parte del mundo desarrollado de hoy, incluyendo a Estados Unidos, donde el 10 por ciento más rico captura más del 50 por ciento del ingreso del país, en una proporción que sigue aumentando la desigualdad a un ritmo que se hará insostenible en el largo plazo. Para Piketty todo esto es fruto de las tesis del libre mercado, dado que los mercados autorregulados son un esquema donde r > g.. En los sobre valorados modelos de crecimiento de Robert Solow gran parte del crecimiento era explicado por un componente desconocido que Solow bautizó como “residuo”. Ahora sabemos que ese residuo tiene nombre: es la renta del capitalista. Nadie se había fijado en eso antes, como reconoció el propio Solow.

Piketty encuentra una notable excepción al reinado de r > g en el período entre 1945 y 1970, la llamada “Edad de Oro del Capitalismo,” también conocida como la "gran compresión", cuando las economías de Europa y Estados Unidos se expandieron y la desigualdad se redujo. No es ninguna coincidencia, indica Piketty, que este período diera lugar al credo optimista de la economía moderna, en la cual << el libre mercado proporciona dividendos a todos>>.
Ese hedonism, fue una simple ilusión: visto en su contexto histórico, la Edad de Oro del capitalismo sólo fue una excepción transitoria a la sombría regla r > g. Dos guerras mundiales tras la Gran Depresión, acompañadas por tasas impositivas compensatorias impuestas a los ricos para pagar el esfuerzo de la guerra, disminuyeron considerablemente las fortunas familiares, estrechando las herencias y reduciendo temporalmente la brecha entre las clases altas y bajas. En este período sí que hubo convergencia y la brecha de desigualdad vivió un cierre significativo.
El gran mérito de la investigación de Piketty es que muestra todo esto con abundantes datos históricos que resultan inconfundibles. De ahí el impacto que está teniendo el libro en todo el mundo.
Piketty va aún más allá y establece una importante crítica a la teoría económica; "Durante mucho tiempo los economistas han tratado de definirse a sí mismos generando dos tipos de observación cuantifica y social analítica, valorando mas ,en términos de sus métodos supuestamente científicos. De hecho, estos métodos se basan en un uso inmoderado de los modelos matemáticos, que con frecuencia no son más que una excusa para ocupar el terreno y enmascarar la vacuidad del contenido. Demasiada energía ha sido y está siendo desperdiciada en pura especulación teórica sin una especificación clara de los hechos económicos que uno está tratando de explicar o de los problemas sociales y políticos que se está tratando de resolver".
Tiene razón Piketty en que la economía ha perdido su pasión de hacer frente a los grandes problemas y se ha quedado en el show mediático del enmascaramiento del vacío. Todo se basa en banalidades y cuestiones pequeñas, llevadas al extremo en la corriente Freakonomics, que aborda el comportamiento de los luchadores de sumo o por qué los traficantes de drogas viven con sus madres. Cuando en España hay un 25 por ciento de desempleo, que no tiene ninguna salida a la luz de las propuestas de la UE, la economía debe volver a enfocarse en los grandes problemas, como el empleo y la desigualdad, la redistribución de la riqueza, y proponer soluciones.
EL SANDALO.

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL VERICUETO DE LAS LLAMADAS SOCIALIZACIONES DE LAS OBRAS PÚBLICAS

EL ÁRBOL DE MEDIOS Y FINES

El aeropuerto Rafael Núñez y su pago en mitigar, Corregir, Compensar lo social para el barrio de Crespo